Celebraciones de verano
Los meses de verano son los preferidos para las celebraciones, porque con el buen tiempo éstas lucen más y se perciben más alegres ¡La luz lo invade todo!
Y nosotras, las invitadas, también queremos brillar. Pero como las cosas no salen solas, esto requiere de una serie de requisitos y atenciones ¡Que nos lo tenemos que currar, vamos!
Hemos de elegir el vestuario y los complementos de acuerdo, por supuesto, a nuestros gustos, pero también debemos tener en cuenta nuestra propia personalidad. Independientemente, un ingrediente imprescindible es la elegancia; sin ella, no hay nada.
Sonia Peña Couture es una firma que, precisamente, logra con sus diseños una elegancia refinada. Los tejidos y texturas de excepción se complementan con una delicada paleta de colores para dar lugar a creaciones de ensueño. Todo ello siguiendo las más novedosas tendencias y las propuestas de la alta costura.
Un lujo al alcance de un tipo de mujer definida por su marcada personalidad y por ser amante de la belleza en el vestir en las grandes ocasiones.
El que os muestro es uno de los modelos pertenecientes a la colección Couture de esta temporada primavera-verano 2017, de Sonia Peña. Concretamente es un conjunto de vestido y chaqueta de manga francesa con el que cualquier madrina de boda impresionaría.
Es un conjunto muy actual, pero acorde con el alma de la colección Couture, en la que se hace un guiño a la costura tradicional y, especialmente, al equilibrio entre la tendencia y la inspiración en el haute couture parisino.
Esta colección para cocktail, fiesta y madrina abarca un abanico amplísimo de posibilidades para que cada mujer se sienta identificada con sus fascinantes diseños.
No me digáis que la asociación en gris perla y negro de este conjunto no es un acierto… De él me fascinaron los delicados detalles de fantasía como el entredós o el broche en forma de flor con piedras de cristal en uno de los laterales superiores de la chaqueta. Las espectaculares flores de la mitad inferior del vestido resaltan delicadamente sobre el fondo negro.
Tanto el vestido como la chaqueta han sido perfectamente concebidos para resaltar la figura femenina, adaptándose con naturalidad y encanto al cuerpo de la mujer.
Ambas prendas van forradas y la terminación de cada parte del conjunto es prácticamente perfecta. Los cierres de la chaqueta y la cremallera del vestido son “invisibles”, algo que siempre ha sido para mí un símbolo de elegancia.
Se trata de un diseño adaptado a las actuales temperaturas, altamente confortable y con buena dosis de sofisticación ¡La elección ideal para la invitada perfecta!