Vuelvo a Garni Milano
Es irremediable, cuando lo pruebas repites. Me refiero a los bolsos Garni Milano, cuyas colecciones me hacen soñar… Cada uno con su propia personalidad, estilo y diseño para hacer que la mujer se sienta cómoda y llena de confianza cuando los lleva.
En mi post “En cebra” os hablaba de un bolso de tintes salvajes y exóticos, evocador de libertad y fuerza.
El que hoy os muestro es un maxi-bolso (de esos tan utilizados por las celebrities) que nos invita a recorrer las calles de la ciudad, sentarse en un banco o ir a tomar algo al lugar de moda, de día o de noche.
Pertenece a la colección que lleva el nombre de la marca, Garni Milano, emblema de la firma y compuesta por bolsos elegantes, exclusivos y provistos de un cierto toque de fantasía.
Éste es muy espacioso (con diferentes compartimentos en su interior) y cómodo, ya que tiene asas para llevarlo en la mano pero también incluye una correa para colgar. Y estéticamente no hay más que verlo, ¿verdad?
En tonos negro y gris metalizado, la sofisticación es una de las características de este complemento que, además, juega con los relieves e incluye motivos metálicos que lo adornan. Tiene cierre de cremallera para que no se escape nada y en su base hay unos puntos de apoyo también metálicos que me han encantado por una sencilla razón: suelo posar el bolso allá por donde voy (y depende de donde esté, alguna vez también va al suelo) y este detalle es algo que evita que se ensucie ¡Por lo tanto, un 10!
Práctico, cómodo y elaborado con materiales de primera calidad, tengo que aceptarlo: mi Garni Milano es el protagonista absoluto de mi look. De hecho, le aporta personalidad y un estilo muy definido que se ajusta perfectamente al mío.
¿Cuál es vuestro estilo? Estad muy atentas porque puede que en unos días os venga con una sorpresa para vosotras en forma de concurso… con Garni Milano.
¡Hasta pronto!